Escultor argentino. Nació en 1922 en San Juan y falleció en 2009 en Buenos Aires, donde residía desde 1954.
Mariano Pagés, escultor
argentino, nació en 1922 en San Juan y falleció en 2009 en Buenos Aires, donde
residía desde 1954.
Profesor de escultura recibido en la Academia Provincial de Bellas Artes de
Mendoza, cursó luego cuatro años en el Curso de Escultura en la Universidad
Nacional de Cuyo. Fue alumno de Lorenzo Domínguez. En 1960 obtuvo una Beca del
Fondo Nacional de las Artes que le permitió viajar durante seis meses viajando
por varios países de Europa.
Se desempeñó como
Profesor en la Escuela Manuel Belgrano, Capital Federal; en la Escuela Técnica
Maipú, Mendoza; en la Universidad Nacional de Cuyo. Fue director por un breve
período, del Departamento de Artes de Universidad Provincial de San Juan. Realizó
numerosas exposiciones individuales y participó en colectivas. Fue jurado en
diversos salones y certámenes. Sus obras se encuentran en diversas colecciones
del país y en varios países extranjeros.
Fue seleccionado en el
Salón Nacional en los años 1950, 1952 y de 1957 a 1960. Obtuvo Tercer Premio en
el Salón Manuel Belgrano, 1955; Premio Ministerio de Educación, 1960; Gran
Premio de Honor Presidencia de la Nación, 1962; Premio Estímulo en el 40º Salón
Nacional; Primer Premio en el 47º Salón Nacional; Premio en el Salón Municipal,
Buenos Aires, 1961. También obtuvo premios en San Juan, 1946, Mendoza en 1947,
1948 y 1949; en La Plata, 1957, en Santa Fe, 1959 y Premio Konex en cerámica,
1982.
La figura humana, especialmente femenina, fue una constante en la elección de sus motivos; cabezas, torsos, figuras completas, grupos, fueron plasmados en una amplia gama de materiales -piedra, madera, mármoles, cerámica y bronce- que manejó con solvencia en pequeñas esculturas y en grandes monumentos.
Dominó todas las
técnicas, especialmente la talla directa. Realizó elaboradas tallas de altos y
bajos relieves en variados y nobles materiales. Incursionó también en el
modelado sensible de esculturas cerámicas tratadas con esmalte; dotándolas de
una brillante y sensual delicadeza.
Se destacó por su técnica y lenguaje refinados, caracterizándose sus figuras atemporales, por su fineza, su armonía y belleza.
Numerosos críticos han ponderado sus obras. Sin poder ceñir su estilística a una corriente determinada, su producción es de estirpe expresionista.
Monumentos en la obra de Pagés:
El Cacique Guaymallén,
Mendoza (compuesto por tres figuras de piedra de 3,20 ms. de atura cada una),
1949; muro con bajorrelieves en la Bodega Cremaschi en General Alvear que
relata la historia de la vitivinicultura e incluye una gran figura sedente en
piedra arenisca, de 3 ms. de altura, 1952; en 1954, un monumento hoy
desaparecido, “Figura alada”, fibrocemento de 4 ms. de altura en Mendoza,
encargado por la Dirección de la Escuela de Bellas Artes, con motivo de la
inauguración en 1954 del moderno edificio -la figura que representaba el
espíritu del creador en forma de ángel, el que escucha y dice en libertad, fue
destrozada por el gobierno en 1955-; en 1957 se emplaza su escultura en mármol
“Paloma” en el Cementerio de Flores, Buenos Aires; Monumento a Carlos Gardel
(bronce de 2,40 metros de altura) emplazada en el Abasto, Buenos Aires, 2000.
En la galería comercial en la planta baja del Hotel Provincial, San Juan, se
encuentra un mural de madera de pino obregón, de 4 x 8 metros, trabajado con
una técnica muy singular; representa, simbólicamente a San Juan, sus
actividades, su fauna y flora y la ciudad que renace, 1966.