Juan Guillermo Rudolph, oriundo de Thum, Sajonia, (casi en el limite con Checoslovaquia), había nacido el 4 de marzo de 1909 y era hijo de Willi Arno Rudolph y Rosa María Liebig. Este alemán se dedicaba a la industrial textil, fabricaban las maquinas que tejían las medias de seda, furor en Europa en esa época
Por ello en 1930 y con 23 años, Juan Guillermo decide emigrar de su país y llevar las maquinarias e instalarlas en Grecia y luego en Francia. Dos años después viajaría a Uruguay para finalmente radicarse en Argentina donde el negocio textil se encontraba en pleno desarrollo.
Allí conoció a Ana Elisa Pillig, nacida en Dortmund (cuenca del Rhin), que en 1918, había llegado con 6 años a la Argentina. Ana era hija de Carl Pillig y Anna Hepp (oriundos de Bochum). Carl según su certificado de migración era pintor artístico, que se vino a Sao Pablo y desde allí caminando a la Argentina. En su peregrinar tomó notas y realizó bocetos, que luego se llevó a Alemania, pintó cuadros en base a los mismos, y con la plata de la venta logró traer a su esposa e hija a la Argentina.
Anna Elisa y Juan Guillermo tuvieron tres hijos Carlos Guillermo, Rosa María y Juan Alberto Rudolph, estos últimos radicado en Buenos Aires.
Carlos Guillermo el único viviendo en San Juan, tiene una historia de vida digna de contar. Al terminar sus estudios primarios en el Colegio Nacional, decidió, incentivado por su tío Rodolfo Pillig (hermano de su madre), probar suerte laboral en Jujuy, se anotó en la Tecnicatura de Minas de esa provincia, que dependía de la Universidad de Tucumán, y gozaba de muy buen prestigio. Rindió el ingreso y entró en un cupo de 40 alumnos, haciéndose acreedor de una beca completa por todo el tiempo de la carrera.
Fue así que contando sólo 12 años (1947) decidió su vida y nunca más regresó a vivir a la Capital.
Cuando fue técnico se dio cuenta de lo mucho que le gustaba esta actividad y decidió seguir estudiando. Contando 18 años eligió San Juan para perfeccionarse. Cargó el bolsito con un catrecito de esos que se doblan y la ropa. Con esos monitos y sin conocer a nadie, se vino a nuestra provincia.
Se recibió en 1960 de Ingeniero de Minas y en 1962 contrajo enlace con Zulma Isabel Maldonado, hija de Darío Cesáreo Maldonado (Jáchal) y de Isabel García (andaluces). Ese mismo año fue uno de los primeros becados por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet). Así pudo ir a estudiar a Estados Unidos al Instituto Tecnológico de Massachussets. Allí lo tentaron con una muy buena oferta, pero estaba convencido de que había mucha más tarea por hacer acá. Tenía el convencimiento que el IIM y la facultad con trabajo crecerían.
Carlos Rudolph ha pasado casi 50 de sus 71 muy bien llevados años dedicado a la vida universitaria, vinculada a la minería. Primero como docente y luego como investigador y autoridad. El matrimonio Rudolph Maldonado tiene tres hijos:
* * Gustavo Daniel (ingeniero civil y master en economía y finanzas) casado con Josefina Stordeur con un hijo Martín
* * Mónica Bettina licenciada en informática
* * Carina Alejandra (profesora de Ingles) casada con Maximiliano Martín que tienen tres hijos, Agustina (12), Matías (8) y Lucas (2).
Referencias:
Hijos **