¡Qué pronto te olvidas de mí!
¿Qué has hecho de mi corazón?
¿Qué boca recoge tus besos?
¿Quién tus embelesos,
cuál tu adoración?
¿Qué estrella te alumbra, mi bien?
Le quiero mis penas contar;
acaso, si ella me ve llorando,
te diga, titilando
cómo te supe amar...
Triste despertar...
¡Sueño de ilusión!
¡Fénix que renace entre cenizas de un amor!...
¡Llora, corazón,
llora en mi cantar,
que tal vez el llanto desahogue tu dolor!
En alas de un sueño volé
y cerca ya estaba del sol,
entonces, tal cual la quimera,
mis alas de cera
el sol las quemó...
Y ¡pobre de mí que no sé!
no puedo olvidar ya tu luz
y sigo llorando mi destino,
clavada en el camino
sin levantar mi cruz.
Música: Carlos Montbrun Ocampo
Letra: Luis Bates