Un psicólogo, que trabaja con personas excedidas de peso, brinda los mejores consejos para empezar a adelgazar hoy mismo, y no volver a subir.
Por Florencia O´Keeffe. - No puedo”, “Lo intenté mil veces y nada resulta”, “En mi casa con
todos gordos, no tengo otro destino”, “Lo consigo dos días y después, listo, me
como todo”. Estos son algunos de los pensamientos que las personas con kilos de
más repiten por años. La decepción y la angustia se adueñan de los que no logran
vencer a la obesidad. Fabián Kolonisky, psicólogo, director del Programa
Multidisciplinario de Adelgazamiento, Promad, ofrece en esta nota algunos
caminos para alcanzar los objetivos y por fin, bajar de peso y
mantenerlo.
1- “Quiero bajar de peso ya, pero no sé cómo empezar”: lo primero que debe surgir es un objetivo
claro, algo concreto, como cuando uno organiza un viaje. Se sabe qué poner en la
valija y hacia dónde vamos, porque no hay posibilidad de gozar del viaje si no
hay un destino claro. Bajar no tiene que ver con perder kilos , bajar de peso
significa vaciar la mochila emocional porque lo que “me pesa” está directamente
relacionado con lo que “me pasa”. No hay que perder de vista que los problemas
no son un pozo, sino un puente.
2- “Vivo a dieta hace años, y siempre vuelvo a engordar”:
quien hace dieta
comprueba que muchas veces el problema no es bajar , sino que el problema es no
subir. Los resultados no son duraderos porque sucede a menudo, que si se
resuelve el problema de “subir y bajar” de peso, es decir, si se logra el
adelgazamiento y se sostiene, esa persona deberá ocuparse de los temas que
verdaderamente lo angustian. Si bien es cierto que para la persona con problemas
de sobrepeso u obesidad crónica este mecanismo de “sube y baja” es motivo
permanente de angustia, lo que es real es que dicho mecanismo garantiza “tapar”
una angustia mayor. La idea no es luchar contra la obesidad o el sobrepeso ,
sino “construir la delgadez “.
3- “Me voy de vacaciones, ¡no voy a empezar ahora la dieta!”:
las vacaciones
significan disfrutar , descansar , cortar con las actividades diarias , y
justamente sería muy bueno que alguien pueda tomarse vacaciones , que descanse ,
y que corte con la actividad diaria de DESCUIDARSE . Cuando uno logra cambiar el
vínculo adictivo con la comida comienza a comprender que “cuidarme” no es sumar
y restar calorías sino que “cuidarme” es respetarme , preservarme , en
definitiva, ser responsable de mis actos. Cuando se deja un niño al cuidado de
alguien se tiene en cuenta que ese alguien sea una persona adulta y responsable
. Cuando te despedís de un ser querido y te dicen _ chau , cuidate! no te piden
que comas poco, te piden que te preserves , que estés atento, que seas
responsable . Así que es muy llamativo que alguien apueste en vacaciones a
descuidarse.
4- “Listo, dejo de comer desde mañana”: la clave para no subir está en poder reconocer y aplicar los
límites. La obesidad es una enfermedad que se cura con elección y límites . La
propuesta no es dejar de comer , sino cambiar el vínculo excesivo con la comida
que en definitiva es lo único que me lleva al sobrepeso . El crecimiento
verdadero es 50% aprender a incorporar cosas nuevas , y el 50% quitarse los
hábitos viejos y malos.
5- “Subí tres o cuatro kilos por las fiestas, pero me siento re mal”:
es un pensamiento
habitual en esta época. El consejo es que los que tienen poco sobrepeso no
intenten llegar a un peso ideal ( no existe) , pero sí que logren un peso
saludable. No importa cuántos kilos se tengan de más , muchas veces 2 o 3 kilos
pesan como 40 o 50 kg. En verdad, lo que está molestando es cómo me veo, cómo me
siento. La propia imagen es esa que es vista por el espejo más cruel que no es
otro que el de la propia mirada ; si algo molesta hay que sacarlo, lo que sí es
seguro , es que no son sólo los kilos.
Consejo final: “los kilos demás son la
CONSECUENCIA de la angustia , no la CAUSA . Mi recomendación es empezar a hacer
algo por uno mismo, proponerse un objetivo como lo es la CALIDAD DE VIDA y no la CALIDAD
DEBIDA , cambiar el debo por el quiero, preguntarnos si tenemos todo lo que
queremos o si queremos todo lo que tenemos. Dejar el intento para pasar a
la acción , cambiar la reacción por la respuesta , lograr ya en primera instancia
ser quien quiero ser. Saber que para sanar la obesidad y el sobrepeso
sólo tengo que desearlo, recordando que lo que
la mente desea se transforma en definitiva en una orden: "CUIDADO CON LO QUE
DESEAS PORQUE ASI SERA”