Ischigualasto se encuentra en el Departamento Valle Fértil, a 330 kilómetros de la Ciudad de San Juan, en dirección Noreste. Limita con la provincia de La Rioja. Fue creado como Parque Provincial por la ley Nº 3.666 del año 1971. Gracias a ello, es un área todavía no alterada en forma irreversible por el hombre. La extensión del Parque Provincial Ischigualasto es de 60.369 hectáreas.
En el año 2000 el sitio Ischigualasto-Talampaya (esta última zona en la provincia de La Rioja), fue declarado Patrimonio Natural de la Humanidad por UNESCO. Los fundamentos de esta declaración son los rasgos naturales del lugar, de excepcional interés científico-paleontológico, su valor paisajístico, su flora y fauna.
Ischigualasto es una reserva paleontológica de gran valor científico. En este lugar se halla representada, a través de restos fósiles, la más completa secuencia del Período Triásico de la Era Mesozoica. Paleontólogos de todo el mundo encuentran allí restos fósiles de reptiles que vivieron hace 250 a 225 millones de años y se extinguieron hace 70 millones de años.
Uno de los aspectos que hace especial a Ischigualasto es que, además de albergar una gran cantidad increíble de fósiles, posee también una importante diversidad de éstos, especialmente en los representantes de la parte más alta del Triásico, aproximadamente 230 millones de años.
Esta gran diversidad de fósiles de Ischigualasto está representada por aproximadamente 25 géneros de animales que pertenecieron a distintos grupos, entre los que se cuentan los dinosaurios más antiguos, generalmente de pequeños tamaños y hábitos carnívoros y herbívoros. También hay restos de los antecesores de los cocodrilos y de los mamíferos, los dicinodontes, un linaje extinto de grandes herbívoros, y una importante cantidad de rincosaurios y otros reptiles primitivos, que constituían la base de la pirámide alimenticia de los carnívoros.
Herrerasaurus ischigualastensis y Eoraptor lunensis son los dinosaurios más antiguos conocidos hasta ahora. La excelente preservación que caracteriza a los fósiles de Ischigualasto ha permitido el estudio completo de estos animales y el misterioso origen de este grupo de vertebrados.
Estos antiguos dinosaurios no eran de gran tamaño como sus primos del Jurásico y del Cretácico, ya que no excedían los 3 metros de largo. Eoraptor era el más pequeño, alcanzando un metro y medio, mientras que Herrerasaurus medía entre dos metros y medio a tres de largo. Ambos dinosaurios eran depredadores y estaban dotados anatómicamente para correr a gran velocidad. Estos dinosaurios fueron los primeros vertebrados capacitados para correr en dos patas y caminar casi erguidos sobre ellas. De esta forma, podían correr a gran velocidad y dejar libres las manos, que armadas con fuertes garras, los aventajaba como temibles cazadores respecto a otros linajes con los que convivían.
Ischigualasto posee una gran riqueza en la cantidad y diversidad de plantas que representaron el periodo Triásico. Entre éstas, dominaban los helechos y otras más modernas como las gimnospermas o plantas con semillas, que recién estaban apareciendo. Las plantas en estos terrenos se han preservado de un modo particular y casi único a nivel mundial, en algunos casos sólo quedan sus raíces, polen y esporas, pero en otros casos también se encuentran los troncos y ramas de árboles mineralizados y las pequeñas hojas de árboles y arbustos, momificadas enteramente conservando cada rasgo de cuando estaban vivas.
El Instituto y Museo de Ciencias Naturales tiene, en el Parque Ischigualasto, una muestra permanente que tiene como objetivo mostrar los aspectos paleontológicos del lugar, los cuales no están a la vista del turista en su visita.
El museo, que depende de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de San Juan, contiene una descripción de la tarea paleontológica como un proceso continuo desde la búsqueda de los fósiles en el campo, pasando por diferentes tareas de investigación, hasta la preparación de los montajes para ser exhibidos al público.
La muestra exhibe dos de las piezas más importantes colectadas en Ischigualasto. Una de ellas es el Eoraptor lunensis, un dinosaurio muy primitivo encontrado en el año 1991; la otra pieza es el cráneo y la garra de Herrerasaurus ischigualatensis, un dinosaurio que vivió junto con Eoraptor al comienzo de lo que después se convirtió en la "Era de los Dinosaurios". Ambos son los dinosaurios más antiguos del mundo conocidos hasta el momento.
Dentro de la muestra también se podrán observar dos montajes de esqueletos: uno es el de Herrerasaurus ischigualastensis y el otro corresponde a un Frenguellisaurus lunensis.
La Cuenca Geológica Triásica de Ischigualasto – Talampaya es considerada por científicos de todo el mundo como uno de los paraísos geológicos de la República Argentina. Aquí se han conservado rocas que documentan cuarenta y cinco millones de años de la evolución de nuestro planeta. Este lapso de tiempo que va desde los 250 millones de años hasta los 205 millones de años y que se conoce como el período Triásico, está íntegramente documentado en forma de una sucesión continua de capas que van relatando lo que pasó hace tanto tiempo.
El clima desértico que posee la provincia de San Juan es el ideal para la conservación de rocas antiguas, ello ha permitido que los estratos rocosos estén completamente “desnudos”, desprovistos de vegetación, por lo que se exponen idealmente para ser estudiadas.
Como Región Natural, la zona de Ischigualasto es representativa del Monte Arido. Sus principales rasgos son los determinados por la aridez, elevada amplitud térmica diaria y escasez de precipitaciones que ocurren torrencialmente. En este ambiente habita una gran variedad de animales y plantas adaptados a la extrema aridez del medio.
El tipo de vegetación que se desarrolla en Ischigualasto es de tipo xerófita, dadas las condiciones de escasez de lluvia y altas temperaturas. Es por ello que las plantas desarrollan ciertas adaptaciones para obtener del medio los recursos necesarios para sobrevivir. Las características más evidentes son la reducción del tamaño de las hojas, el desarrollo de grandes espinas, raíces modificadas para optimizar la captación del agua y presencia de resinas que cubren las hojas y tallos. Las especies que caracterizan la flora del parque en general son: retama, sampa, chañar, algarrobo, jarilla, distintas especies de cactus y cortadera, entre otras.
Ischigualasto cuenta con una diversidad faunística amplia, integrada por especies animales que, ante las condiciones climáticas, han desarrollado comportamientos de supervivencia como hábitos nocturnos, así como vivir en cavernas. La fauna de vertebrados se encuentra representada por anfibios como sapos y ranas; y reptiles entre los que se destaca una gran variedad de lagartijas, tortugas de tierra, matuastos y yararás.
Entre las aves del parque hay perdiz, tórtola, lechuzo, chimango, chuña, carancho, halcones y aguiluchos. También se encuentran especies en peligro como el cóndor y el ñandú.
Entre los mamíferos, habitan Ischigualasto quirquinchos, zorro gris, urón, puma, liebre europea, vizcacha y guanaco.
Al Parque Natural Ischigualasto solo es posible llegar a través de transporte terrestre. Los servicios de combis y ómnibus charter salen desde la capital de San Juan y desde la localidad de San Agustín del Valle Fértil.
En vehículos particulares, desde la capital de San Juan se accede a través de la Ruta 20 pasando por el Departamento Caucete, el paraje Difunta Correa y el control policial de Bermejo. Desde este punto, es necesario recorrer unos 60 km. hasta el empalme con Ruta Prov. Nº 510 en la localidad de Marayes. Esta ruta lleva hasta la Villa cabecera del Departamento Valle Fértil. La distancia total desde San Juan Capital hasta San Agustín de Valle Fértil es de 260 km. Desde el Departamento de Valle fértil y continuando por la Ruta Nº 510 y Ruta Nacional Nº 150 se accede al Parque Natural Ischigualasto; el recorrido es de 80 km.
El recorrido interno por el Parque Ischigualasto se hace utilizando un vehículo propio y con la compañía permanente de un guía. El circuito para visitantes es de aproximadamente 40 kilómetros e incluye la visita a los puntos más atractivos dentro del Parque. La visita interna cuenta con varias paradas y en algunas de ellas se hacen caminatas cortas en compañía del guía. El tiempo total de la visita dentro del circuito es de aproximadamente tres horas y media.
La primera parada es en la geoforma conocida como el Gusano, donde los niveles de sedimentos muy finos, grises y negros hablan de la existencia de un lago en el Triásico.
A continuación se transita a través de la Formación Los Rastros hasta la siguiente estación, llamada El Balcón de Valle Pintado. Parados en este balcón se puede observar la magnificencia de la segunda formación geológica, la Formación Ischigualasto, la cual alberga entre sus rocas la mayor riqueza fosilífera del parque y fue la que inspiró la denominación de “Valle de la Luna”.
A partir de aquí, el circuito continúa sobre la misma formación, visitando las diferentes geoformas producto de la erosión del agua de lluvia, entre ellas La Esfinge, hasta alcanzar la llamada Cancha de Bochas, conformada por una extensa planicie en la que se destacan esferas de areniscas que la erosión va dejando al descubierto.
La visita continúa visitando el Submarino, una de las formas más características y difundidas de Ischigualasto. La próxima estación es en El Hongo. Finalmente, las Barrancas Coloradas, acompañan al visitante hasta el final del recorrido.
Fuentes consultadas:
Dirección de Conservación y Áreas Protegidas - Subsecretaría de Medio Ambiente - Secretaría de Turismo, Cultura y Medio Ambiente del Gobierno de San Juan.
Subsecretaría de Turismo - Secretaría de Turismo, Cultura y Medio Ambiente del Gobierno de San Juan
www.sanjuan.gov.ar
www.ischigualasto.gov.ar