“Hombres de ingenio” se denomina a la serie de esculturas, pinturas y dibujos realizada por Hugo Vinzio Rosselot entre los años 2013/14. Siguiendo su línea de trabajo, los temas se resuelven en clave del humor gráfico (caricatura) e historieta.
“Hombres de ingenio” se denomina a la serie de esculturas, pinturas y dibujos realizada por Hugo Vinzio Rosselot entre los años 2013/14. En ella se rescata la figura de grandes descubridores e inventores: Newton, Marconi, Descartes, Galileo, Arquímedes, Leonardo de Vinci, Copérnico, Graham Bell, T. Alva Edison, Einstein, Wilbur y Orville Wright, Tesla, Benz; así también como los autores de ciencia ficción Julio Verne y H. G. Wells y se ilustran episodios de la conquista de la atmósfera.
Siguiendo su línea de trabajo, los temas se resuelven en clave del humor gráfico (caricatura) e historieta. Si bien desde el punto de vista formal se relaciona con la sátira, la actitud no se condice con ella, resulta menos burlesco que crítico de la solemnidad y la grandielocuencia. En algunas declaraciones, el autor ha expuesto que sus creaciones tienen un tono mordaz, ácido, hasta llegar a lo grotesco. Desde el punto de vista de esta apreciación no se estima que esa caracterización resulte adecuada. Una cosa es la concepción del mundo del autor y por otra el efecto estético que las obras producen. Las deformaciones de estas obras rescatan lo humano de las celebridades y los “prototipos” constituyen un apenas velado homenaje a la imaginación técnica.
Hugo Vinzio Rosselot pertenece a una familia en la que varios de sus miembros se dedican a las artes y se formó en un tiempo difícil: final de la década del 70 y comienzos de los 80. Los primeros trabajos de Vinzio dan cuenta de una gran simplificación lineal muy ligada a la ilustración popular, aunque posteriormente se observa la opción por el expresionismo en mezcla de materiales, deformación, contrastes en la composición y el énfasis del detalle.
La producción del artista ha mostrado coherencia en el lenguaje, solidez técnica y constituye una alternativa estética que no tiene demasiados representantes. Una clave para la interpretación es la juvenil relación con el rock – una de sus primeras incursiones en la producción artística fue la ilustración de una ópera rock -. Desde los 60, en Argentina la cultura beat coexistía con la cultura “oficial”, aunque debió agazaparse durante la dictadura. La articulación esclarecedora se produjo con la denominada corriente progresiva, que en nuestro medio se cumplió en el “rock nacional”, que aunque muchos lo olvidan, tuvo cultores de excelencia en San Juan.
Así como las bandas abandonaron la sencillez comercial de la música popular para relacionarse con la instrumentación y composición propia del jazz y la música clásica, y cambió las letras pedestres por poemas filosóficos; en los lenguajes gráficos el giro se observa en la historieta. A diferencia del arte pop – representada por la línea del Di Tella que adoptó una actitud irónica sobre la cultura popular -, en la historieta se estableció una conexión entre los sistemas populares y la denominada “alta cultura”.
En el caso de la obra de Vinzio este aspecto resulta relevante cuando se recuerdan los temas a los que se ha avocado - como por ejemplo la secuencia “Dígame Borges” – y también el sustrato de las alusiones a la ciencia presente en la actual muestra. En tal sentido se trata de un creador dentro de las artes plásticas locales que se destaca por la calidad estética y resulta relevante en su línea de trabajo y dentro de su generación.
Se expone en el Centro Cultural Gral. San Martín - Ex Estación de Ferrocarril Gral. José de San Martín-, auspiciado por Centro de Ingenieros, el Colegio de Profesionales de la Agrimensura, la Sociedad de Arquitectos, el Consejo Profesional de Ingenieros y Agrimensores, Colegio de Arquitectos, e integra el programa de actividades en Homenaje al Centenario del Centro de Ingenieros, Agrimensores y Arquitectos de San Juan.