Autor: Jorge Leónidas Escudero
Llegó la noche como a veces llega
presagiosa, tal como si fuera a temblar.
Los perros ladraban hasta en los confines.
Digo en el aire se sentía revolotear
una mariposa negra y
sucede esto como siempre cuando
a veces me despierto y bajo la almohada
se anidan pensamientos tristes.
Les cuento esto y a saber si
es por tonto que me sucede
o simplemente por abuso de edá.
Es un temor en no pasa nada, aunque
es lógico me asuste
cuando despierto y en la oscuridad el tiempo,
disimulada y traidoramente,
siento que m’ está chupando la sangre.
Fuente: Divisadero - Ediciones en danza