El Fortín es uno de los sitios más antiguos de San Juan. Es una vieja estancia que fue habitada por jesuitas entre 1742 y 1767. Tiene elementos que ya no existen.
El lugar fue donado a los Jesuitas por Lorenzo Quirós. Luego pasó de manos hasta que llega a la familia Grimalt, que en abril del 2014 logró que se convirtiera en un museo y centro cultural para que los sanjuaninos y visitantes conocieran parte de la historia de esta orden que habitó en Ullum.
La vieja casona cuenta con 10 habitaciones, entre salas y dependencias de servicio, en las que se conservan valiosos elementos históricos. Entre ellos una colección del Correo Argentino que cuenta con el telégrafo que Sarmiento trajo a la provincia, una antigua bodega, una pulpería y demás.
Fuente: tiempodesanjuan.com