Este artículo fue publicado en El Nuevo Diario, edición 1392 del 5 de junio de 2009.
Cuando comenzaba el siglo pasado ya la publicidad a través de medios de comunicación
era algo corriente. El monopolio lo tenía el periodismo gráfico pues la radio
aún no nacía y mucho menos la televisión. Llama la atención la cantidad de
avisos relacionados con artículos presuntamente útiles para la salud y la
belleza. En su mayoría se trataba de simples engaños que se aprovechaban de la ingenuidad de la gente. Estos avisos fueron algunos
de los publicados en la revista Caras y Caretas entre 1905 y 1920.
Algunas de ellas pertenecen al libro “El San Juan que usted no conoció”, de
Juan Carlos Bataller