La provincia de San Juan posee una rica fauna autóctona que ha conseguido, a través de una extensa evolución, adaptarse a una geografía predominantemente árida y de temperaturas extremas.
En este contexto, muy representativo de nuestra geografía es el guanaco, un mamífero perteneciente a la familia de los camélidos propia de Sudamérica.
Parecido a la llama, el guanaco es algo más chico y posee una apariencia distinguida debido a sus largas patas y cuello.
Habita sobre todo regiones áridas, semiáridas y montañosas y sus hábitats tienden a ser abiertos, como pastizales desérticos, praderas y matorrales en donde encuentra su alimento preferido por tratarse de un herbívoro. El guanaco es el herbívoro más grande de las zonas áridas de América del Sur.
Es el mamífero más alto de la fauna sudamericana. Es muy tolerante a la amplitud térmica, tanto diaria como estacional. Desde el nivel del mar hasta los 4000 metros de altura.
Costumbres: Es diurno y gregario. Generalmente vive en grupos formados por un macho adulto y 4 a 20 hembras acompañadas de sus crías. También forma tropas de “solteros” compuestas exclusivamente por machos jóvenes, que ya se separaron de sus madres y se agrupan hasta llegar a la edad de formar su propio grupo.
A veces se observan machos solitarios y hembras solas con sus crías. El macho dominante de una tropa permanentemente está vigilando, un poco apartado de las hembras, mientras estas pacen. Cada grupo delimita su territorio marcándolo con acumulaciones de heces. Al macho dominante se lo suele llamar “relincho" por la característica vocalización que emite cuando alerta sobre un peligro o se enfrenta en una pelea con otros machos. Durante el invierno los grupos disminuyen su territorialismo y se reúnen en tropas numerosas de 100 a 500 Individuos. Cuando se siente amenazado huye al galope, pudiendo alcanzar velocidades de hasta 60 km/h.
Reproducción: las hembras entran en celo a fines de la primavera; en este momento los machos se enfrentan en duros combates, dándose fuertes patadas, intentando morderse el cuello y lanzándose fuertes salivazos a la cara. La gestación dura unos 11 o 12 meses y a su término nace una sola cría que pesa entre 8 y 15 kg. La cría, también llamada “chulengo”, es amamantada por 6 a 15 meses. La hembra alcanza la madurez sexual al año y medio y el macho a los dos, pero permanece en los grupos de "solteros” hasta los 3 o 4 años.
En San Juan hay guanacos en la zona de Ullum, en proximidades de la Estancia Don Carmelo, en la Reserva San Guillermo y también se pueden observar en las zonas aledañas a Mogna. Esto, además de toda la zona precordillerana camino al país chileno.