La capilla de San Nicolás de Tolentino, un edificio colonial

La Capilla San Nicolás de Tolentino, situada en Albardón, San Juan, exhibe una fachada imponente, de estructura simple y blanca, que destaca con un gran campanario y un rosetón de vidrios de colores coronado por una cruz, anunciando su carácter sagrado. Inicialmente albergó la imagen de San Nicolás de Bari en 1921, antes de que los descendientes de Nicolasa Díaz de Quiroga encargaran la imagen de San Nicolás de Tolentino, que ahora preside el Altar Mayor. Este enclave rural, en contraste con la aridez circundante del cordón del Villicum, ofrece un entorno ideal para disfrutar del sol y el aire puro, además de sumergirse en la vida de un pueblo donde las tradiciones se entrelazan con las actividades rurales.

La construcción de la capilla se inscribe en el contexto de la arquitectura colonial argentina, caracterizada por su sencillez y funcionalidad. La ciudad de San Juan, como parte de la región de Cuyo, sufrió la destrucción de sus principales edificaciones religiosas durante el terremoto de 1944, incluyendo la antigua Catedral y la Basílica de Santo Domingo.

La edificación de la Capilla San Nicolás de Tolentino comenzó en 1940 como respuesta a la necesidad de un espacio más amplio para albergar a los fieles que acudían, especialmente durante las festividades patronales. El estilo arquitectónico de la capilla refleja la influencia de la época y los recursos limitados disponibles, utilizando materiales locales como adobe y caña para sus muros y techos. Los elementos estructurales, como los pórticos de hormigón, fueron diseñados considerando las condiciones del terreno por el ingeniero Fabriziano Palmero, con supervisión de Obras Públicas y Ernesto Basla.

La fachada de la capilla presenta características distintivas, con detalles construidos en ladrillo común, un campanario de estilo colonial ubicado en la línea de la fachada, y una puerta principal en arco con molduras y pilastras. El diseño del frente, incluyendo el entrepiso destinado al coro, fue inspeccionado y aprobado por autoridades pertinentes.

En resumen, la Capilla San Nicolás de Tolentino representa no solo un lugar de culto, sino también un testimonio de la arquitectura colonial en Argentina, adaptándose a las condiciones locales y las necesidades de la comunidad.

GALERIA MULTIMEDIA
albardón capillas