Esta foto de la gruta de Fátima fue tomada el 4 de junio de
2003.
La gruta ubicada en General Acha y José Dolores, Rawson, se
construyó en la década de 1960. Fue diseñada por el presbítero Erasmo Salomoni
y construida con piedras traídas desde Ullum. Está ubicada en el mismo terreno
de la Iglesia de Nuestra Señora de Fátima, cuyo primer templo fue edificado en
1946.
La gruta construida años después del templo es un escenario
que en la planta baja cobija a un Cristo crucificado. Encima, un techo en
medialuna al que se sube por una veintena de escalones de piedra laja y que
llevan a la tradicional imagen de la Virgen María amparando a los tres
pastorcitos de Fátima, Lucía, Francisco y Jacinta.
Todo está recubierto con piedra de travertino volcánico de
la zona de la Laja, Albardón.
Cuentan el sacerdote, Erasmo Salomoni llegó a fines de la
década del ´40, al humilde templo que había en el Barrio Obrero Rawson, hizo
una promesa a la Virgen de Fátima: si él no era trasladado de esa comunidad,
iba a construirle un templo y una gruta nueva. Así lo recuerdan los fieles más
tradicionales de la zona, como la ex ministra de Educación, Ana María Nieto de
García.
Un vecino de apellido López, en 1954 donó el terreno y ayudó
a traer las piedras de travertino volcánico desde la Laja.
Aseguran que la comunidad de Rawson hizo aportes no sólo de
dinero sino también trasladando restos de la vieja Casa de Gobierno y de la
antigua Catedral, ambas ubicadas frente a la Plaza 25 de Mayo, (madera, cartón
prensado y chapa), los que se usaron en la construcción del Templo Viejo y de
la Gruta.
En su costado norte se construyó un nuevo templo, que,
aunque posee un diseño modernista, se integra a lo anterior.
El 13 de mayo de 2000, la Gruta, el templo viejo y el
campanil de la Virgen de Fátima fueron declarados Patrimonio Arquitectónico
Municipal y luego Monumento Histórico Cultural Provincial.
Fuente: Publicado en Nuevo Mundo, edición
965 del 12 de julio de 2024