El 25 de junio de 1925 fue declarado de utilidad pública el valle denominado Quebrada de Zonda, para ubicar en ella el Parque Provincial Bernardino Rivadavia.
Caminos sobre la Quebrada de Zonda, comunicados por túneles, popularmente conocidas como "las minas de Zonda", en realidad eran paseos para contemplar las imágenes que se formaban con la forestación del valle, estas terrazas estarían forestadas y dejaban pasajes ampliados para detener los vehículos y apreciar el panorama.