El 10 de diciembre de 1983 con la asunción a la Presidencia de Raúl Alfonsín se restablece la democracia en Argentina. Con amplio apoyo de sectores medios y el activismo juvenil que sostenía la necesidad de quebrar la dependencia el presidente Alfonsín inicia su gestión proponiendo, como una de sus principales medidas, la investigación de las torturas y muertes producidas durante la dictadura cívico-militar.
Para ello, el 15 de diciembre de 1983 creará la CONADEP (Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas).