Autor: Antonio de la Torre
El viento, despeinando sauces,
enreda sus silbos por los alambrados.
El sensual perfume de los pastizales
me enciende la carne con sus finos dardos.
La viña, vencida, sus senos morenos
descubre con dedos de tremantes pámpanos.
El sol, desde Oriente,
-araña de orocuelga hirientes hilos de plata en los álamos.
Los claros caminos invitan al viaje
con la paz de un simple verso virgiliano.
Fuente: http://www.antoniodelatorre.com.ar