Historias de la llegada a San Juan de inmigrantes que formaron familias que hoy son protagonistas de la vida provinciana.
Los Cisella son conocidos por su trayectoria en la música. El talento de la familia tiene su historia y viene de Italia. Los hermanos José y Pedro Cisella, dos destacados tenores, fueron los primeros en desenvolverse en el mundo artístico. En la siguiente generación, fue Mario uno de los que heredó la pasión musical y contagió el amor por ese arte a su hija Mónica y a sus nietos, que son los integrantes del grupo de rock Legado.
José y Pedro eran hijos del matrimonio de Luis Cisella y Clara Ceratti. Nacieron a principios del siglo XX y tenían otros dos hermanos: Mario y Margarita. Los Cisella Ceratti eran una humilde familia de constructores que vivía en la ciudad de Breme, Italia.
En 1912 Luis Cisella y sus hijos José y Pedro se vinieron a Argentina contratados por una empresa inglesa y trabajaron en la construcción de las torres inglesas que hoy están en la zona de Retiro. Dos años después, cuando terminaron la obra, volvieron a su país. El regreso a Italia no fue el mejor. Había empezado la Primera Guerra Mundial y a los pocos días de volver a su pueblo, José y Pedro fueron enlistados para pelear.
En medio del conflicto, Pedro, que en Argentina había aprendido algunos tangos, les tocaba a los soldados durante los descansos en los cuarteles. Cuando sus superiores vieron su talento dejaron de mandarlo al frente y desde entonces trabajó para entretener a la milicia. José, a quien le decían “Pipo”, se llevó la peor parte, fue herido por una granada.
Cuando terminó la guerra, en Italia no quedaban esperanzas para los dos jóvenes. Así que José, que se había casado con María Antonieta Guazzora, decidió venirse con su hermano a Argentina.
Los comienzos en Argentina
Los Cisella arribaron al puerto de Buenos Aires aproximadamente en 1920. Estuvieron un tiempo en Villa Mercedes, San Luis y luego llegaron a San Juan, donde se había radicado un amigo de ellos.
En la provincia, José y Pedro se dedicaron a la construcción. Al principio trabajaron juntos restaurando fachadas y el boca a boca les permitió hacerse conocer entre los sanjuaninos. Eso fue durante poco tiempo, después tomaron diferentes caminos.
José trabajó en la edificación de la bodega Graffigna y a mediados de los años veinte comenzó a ocuparse de su propia empresa constructora. Con ella trabajó hasta que falleció, en 1957. Desde entonces la firma quedó en manos de sus hijos.
Mientras José comenzaba con su propia empresa, Pedro se fue a Buenos Aires. Allí estuvo tres años, trabajó en una fábrica de guantes e integró una compañía lírica que recorría todo el país. Cuando regresó a la provincia, en 1943, formó una empresa constructora junto a los ingenieros Constantino y Sarmiento. Se llamaba Delca y, entre otras obras, construyeron el edificio de Vialidad Nacional y el de la Casa España. Dejó la construcción en 1955, cuando se desarmó la sociedad. Desde entonces se dedicó al almacén de ramos generales que tenía desde hacía varios años. Lo atendió hasta 1963 y falleció en 1978.
La vocación por la música
En San Juan los hermanos José y Pedro fueron parte de dos formaciones. La primera fue el cuarteto Colón, que también integraba el maestro Aguado y el profesor Pérez Lobos. Fueron uno de los primeros números que tocaron en vivo en Radio Colón y el gobierno los contrataba para que actuaran en los actos oficiales.
Mientras actuaban con el grupo, cada uno de los hermanos desarrollaba actividades en forma independiente. José cantó durante unos meses en Radio El Mundo y a Pedro lo contrataban para cantar en las iglesias de la provincia.
El cuarteto actuó algunos años hasta que a mediados de la década del cincuenta los hermanos Cisella formaron la Orquesta Característica Don Pipo. A ese grupo entró la segunda generación con Mario, el hijo de José.
Después de que falleció Pipo la orquesta pasó un tiempo sin tocar y ahí nació otro proyecto paralelo, “Los cuatro maravillosos”, que estaba integrado por Pedro y sus sobrinos Mario y Rosalía Cisella, entre otros. Ese grupo duró poco más de un par de años y la orquesta sobrevivió hasta la década del ochenta.
Aparte de tocar junto a su padre y tío, Mario Cisella integró con amigos la Orquesta Oro y Negro. Su descendencia es la que ha mantenido vivo el amor por la música. Su hija Mónica cantó en los coros Pre y Universitario de la Universidad Nacional de San Juan, en el Arturo Beruti, en el de la Universidad Católica de Cuyo y en la Camerata del Sol. Junto a su fallecido esposo, Pedro Quiroga, integró el dúo Mónica y Pedro y el grupo Los Trigales.
Los hijos de Mónica, también son herederos de la vocación musical de su abuelo y bisabuelo. Ellos son Pablo, Leonardo y Melisa Quiroga, que integran el grupo de rock Legado.
Las nuevas generaciones
Pedro Cisella y Antonieta Guazzora tuvieron seis hijos.
El primero falleció siendo bebé cuando vivían en San Luis y del resto solo quedan vivas las dos mujeres.
El mayor, Luis, fue diputado provincial y ministro de Economía. El segundo, José, fue quien se hizo cargo de la empresa de su padre después que Mario, se radicó en Catamarca, donde siguió con el emprendimiento y llegó a ser intendente del departamento de Tinogasta. Las dos menores son las mujeres Clara y Rosalía son las únicas hijas vivas.
Mario, que era el tercero, fue el único que siguió la vocación de Pipo. Fue empleado bancario y tuvo cuatro hijos: Mario, Mónica, Ricardo y Ernesto.
Mónica es la única que viven en San Juan y tiene tres hijos: Pablo, Leonardo y Melisa Quiroga, los integrantes de Legado.
Todos los hombres se radicaron en Italia. Mario vive en Milán, tiene un estudio de grabación, tres hijos: Noelia, Martín y Gabriela y un nieto, Alessando. Ricardo reside en Bérgamo, trabaja en el aeropuerto de la ciudad, tiene tres hijas: Romina, Yésica y Agostina y está esperando una nieta. El menor, Ernesto, vive en Milán y tiene una empresa de construcción.
Pedro Cisella se casó con Lucía Menegazzo y tuvieron tres hijos. La mayor fue Clara, que falleció a los veintinueve años y tuvo dos hijos: Adolfo Pedro Rodríguez, que ya falleció y Mario Rodríguez. La segunda hija del matrimonio es Elizabeth, que se ha desenvuelto como profesora de piano y fue supervisora de escuelas. El menor es Pedro, es enólogo y fue presidente de la Escuela de Degustadores y del Consejo Profesional de Enólogos. Tiene dos hijas: Yanina Cisella y María Cecilia, madre de María Sol y Facundo de los Ríos.
Integrante de los grupos: “Mónica y Pedro” y “Los Trigales”. También prestó su voz para distinguidas agrupaciones corales de San Juan.
Mónica Cisella nació el 21 de octubre de 1957. Es hija del bancario Mario Cisella, que integró la banda de jazz “Don Pipo” y se hizo cargo del conjunto desde 1958 hasta la década de 1980. Además, es nieta de José Cisella, conocido popularmente como “Pipo”, que fue cantante del Colon y formó el grupo que llevaría su apodo.
Es egresada de la Escuela Normal Sarmiento y profesora de Educación Musical. Se ha desenvuelto como docente de música de nivel medio en varias escuelas y además ha integrado reconocidas agrupaciones corales de la provincia. Cantó en los coros Pre y Universitario de la Universidad Nacional de San Juan, en el Arturo Berutti, en el de la Universidad Católica de Cuyo y en la Camerata del Sol.
En 1979 se casó con Pedro Quiroga, quien además fue su compañero musical. En esa época formaron el dúo Mónica y pedro, que llegó a actuar en el escenario del Festival de Cosquín.
En la década de 1980 el matrimonio se sumó al grupo Los Trigales, integrado por los ex Manantiales, Luisa Peñalba y Beto Avalo. El cuarteto se mantuvo varios años hasta que Pedro falleció, en 1998.
Los Quiroga Cisella tuvieron tres hijos: Melissa, Leonardo y Pablo, que heredaron el talento y la pasión por la música de sus padres. Los hermanos formaron el trío “Legado”, que resultó ganador del Concurso de Intérpretes organizado por el programa La Ventana en el 2007.